Durante crisis como la que estamos viviendo, se puede experimentar una importante dificultad (emocional, física, económica…), especialmente en profesionales, que van a convivir diariamente con la enfermedad, el sufrimiento de otros y condiciones de trabajo bajo un estrés fuera de lo común. El miedo y las ansiedades son inevitables.

Algunos Consejos y Pautas más específicas ante la actual situación

1. Céntrate en lo que está bajo tu control

Durante crisis como la que estamos viviendo, se puede experimentar una importante dificultad (emocional, física, económica…), especialmente en profesionales, que van a convivir diariamente con la enfermedad, el sufrimiento de otros y condiciones de trabajo bajo un estrés fuera de lo común. Tarde o temprano, todos vamos a experimentar numerosas dificultades. El miedo y la ansiedad son inevitables.

Por ello, el primer paso es centrarse en lo que se puede controlar. No podemos controlar las consecuencias de la crisis o las decisiones que otros toman, no podemos controlar al 100% lo que vamos a sentir, pero podemos controlar lo que hacemos, aquí y ahora y eso es importante. Lo que haces aquí y ahora pude suponer una enorme diferencia, para ti mismo y para los demás.

2. Reconoce tus pensamientos y emociones

Conecta con tu cuerpo y tus sensaciones físicas. Negar o no identificar lo que sentimos físicamente nos puede traer consecuencias importantes, por ejemplo, sobrecargarnos en exceso, sensaciones como la despersonalización y un incremento del estrés a largo plazo. Busca tu propia forma de conectar con tu cuerpo. Estás son algunas formas:

• Haz una respiración profunda y lentamente.
• Suavemente, presiona tus pies contra el suelo.
• Estira tu espalda y tu columna
• Suavemente, presiona la yema de tus dedos                          
• Suavemente, estira tu cuello y brazos, mueve tus hombros

Recuerda: no estás intentando huir de tus emociones, sino llevar a cabo acciones pequeñas para conectar con tu mundo interno. Esto te permitirá tener mayor consciencia de emociones y pensamientos, para tener mayor control sobre tus acciones.

3. Comprométete con tus acciones

Toma consciencia de donde estás y lleva la atención a lo que estás haciendo. Los pequeños ejercicios de la sección anterior te pueden ayudar a reconectar con la acción que estás llevando a cabo, en vez de enredarte con tus pensamientos y emociones. Así la tarea puede ser más efectiva. Otras estrategias para manejar tu atención y conectar con el presente:

Mira alrededor de la habitación y observa 5 objetos dentro de tu campo de visión, Nota 3 o 4 cosas que puedas oír,  Nota algo que puedas oler, Nota lo que estás haciendo, Intenta hacer esta actividad a menudo, PERO si estás en un entorno muy estresante, dónde las cosas a tu alrededor puedan generar una emoción muy intensa que te desborde, trata mejor de hacer alguna pauta del apartado anterior o, simplemente, enfócate en tu respiración.

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